La revisión y el testeo personal, por humanos, debería empezar a formar parte crucial del proceso para validar las soluciones de accesibilidad y de inclusión digital. De hecho, la WAI, (Web Accessibility Iniciative), prescribe entre uno de sus criterios de validación de sitios Web, el testeo por usuarios reales como una metodología para asegurar la efectiva validación de los sitios Web.La comunidad de usuarios también son una fuente de relevancia y validez en los procesos de prueba y testeo de la accesibilidad. Iniciativas como las que se están desarrollando en algunos países empiezan a ofrecer experiencias interesantes para determinar y cartografiar los niveles de alcance que ofrecen diversas aplicaciones de accesibilidad para la comunidad de usuarios con discapacidad.
En EEUU por ejemplo un grupo se reúne en una esquina de la calle Nashville, algunos en silla de ruedas y otros caminando. Todo llevan sus teléfonos inteligentes y charlan entretenidos mientras que un coordinador les ayuda a iniciar sesión en una aplicación. Se dispersan en pequeños grupos, examinan restaurantes, cafés y tiendas, buscando características que indiquen que la discapacidad es de alguna forma bienvenida allí.
un letrero de estacionamiento con el Símbolo universal de accesibilidad, una rampa para sillas de ruedas, una puerta delantera automática, un baño amplio y con barras de apoyo , señalética en braille, pisos no excesivamente reflectante, jabón sin olor, etc.
El grupo de personas con discapacidad utiliza la aplicación para documentar y calificar estas características. Una vez enviada, la información se acumula en una base de datos que otros podrán usar para facilitarse la ubicación de puntos accesibles.
El itinerario ha sido definido como un “map-a-thon” de accesibilidad, un esfuerzo colectivo por documentar las características del entorno tanto en términos físicos como digitales.
De este modo el activismo de la discapacidad en algunos país esestá Aprovechando las tecnologías de ciudades inteligentes, en particular las bases de datos geolocalizadas de empresas y negocios para compartir información que de otra manera podría estar disponible solo de boca en boca. Una combinación de Google Maps y lo que algunos usuarios de la comunidad de personas con discapacidad denominan "Yelp para la discapacidad.
