jueves, 30 de diciembre de 2010

Escanear con el Móvil

Aplicación para el iPhone.
App of the Day Logo.
Precisamente hoy por la mañana conversábamos con nuestra amiga Esperanza villafuerte, acerca de la necesidad de disponer de algún escaner portátil. Para el usuario con discapacidad visual, y sobre todo para quien está estudiando o haciendo investigación, una herramienta indispensable es el escaner que le permita usarlo en cualquier lugar.
Hasta ahora conozco solo una aplicación que puede cumplir esta tarea, aunque, de momento su lectura tiene que hacerse en un segundo tiempo.
Aquí, en la Web de Appl of the Day, nos alcanzan ScannerPro, una aplicación para iPhone que permite escanear documentos breves y de manera rápida. Una vez tomada la imagen, automáticamente lo envía a nuestra cuenta de Gmail asociada con el dispositivo.
Creo que es una solución interesante, sobre todo si se precisa mucha info, pues, tal como le indicábamos a Esperanza, en ciertos casos, ella podría tomar imágenes de documentos completos, y enviarlo vía mail, a cidesi, y allí, el servicio de Infolector lo pasaría a texto, para retornárselo inmediatamente, y disponer del documento ya completamente digitalizado.
En todo caso, es parte de una tarea de articulación de esfuerzos y habilidades de los usuarios en conjunción con los servicios de información.
Dejamos aquí, la información que se ofrece en la Web de App of the Day:
ScannerPro maneja fácilmente las situaciones cuando se tiene un documento impreso que deberá ser enviado por correo electrónico y no tiene un escáner cerca. La aplicación incorpora algoritmos especiales para incrementar la calidad de imagen y que sea lo más legibleposible.
Con ScannerPro puede escanear:
Los documentos, tarjetas de negocios, recibos, notas y pizarras.

lunes, 27 de diciembre de 2010

Dictado de Texto en el Móvil

Con Dragon Dictation y en el iPhone.
Applesfera.
Una de las funciones que el usuario invidente hecha de menos en un dispositivo móvil, sobre todo de los más actuales, es sin duda alguna solución o aplicación de reconocimiento de voz. Muchos de seguro, ya conocían o utilizaban el famoso Dragon NaturallySpeaking, según se afirma, la mejor solución de reconocimiento de voz del mercado.
Hace más de un año, salió la nota de la aplicación Dragon Dictation para iPhone. Sin embargo, la limitación estaba en el idioma que soportaba esa primera versión.
Bueno pues, acaba de lanzarse ya la versión que soporta varios idiomas, y entre ellos, el español.
Nosotros en Infolector solo lo hemos probado muy al vuelo, y apenas tengamos un mejor dominio del tema, compartiremos parte de su experiencia. entre tanto, dejamos algunos tips para su uso, aparecido en applesfera:
El funcionamiento es muy simple, sólo tenemos que pulsar el botón grabar de la aplicación y empezar nuestra locución. Me ha sorprendido bastante el buen funcionamiento de la aplicación, tras unas cuantas pruebas es cierto que alguna vez comete algún error pero en general el reconocimiento es casi perfecto.
La aplicación sigue siendo completamente gratuita y puede que sea una opción interesante si pretendes escribir un texto excesivamente largo desde tu teclado virtual, puesto que una vez reconocido el texto lo puedes copiar y pegar en cualquier aplicación.

lunes, 20 de diciembre de 2010

Un Ciego de Compras

Crónica de una travesía consumista.
Infolector Logo.

Son casi las doce y media del día, y a punto de salir de refrigerio. Tiene que decidir entre el almuerzo, o la compra aquella que ha quedado pendiente desde la semana pasada. Saca la billetera del maletín, guarda el móvil en el bolsillo del pantalón, - el bolsillo de la camisa no es seguro para un dispositivo tan grande -, y toma el reporte de pago que la tienda en cuestión le remite mensualmente.
toma el bastón, y sale rápido, para tratar de hacerlo todo, en menos de una hora, tiempo permitido para el refrigerio en el trabajo. Hasta las escaleras, camina sin bastón, ya se conoce el camino de memoria. Baja rápido del segundo piso, y se dirige hacia el marcador, para registrar su salida a refrigerio. Pasa la tarjeta electrónica ante el sensor, y este emite el sonido característico de marcado. Se dirige a la puerta de salida. En el camino, un compañero le pasa la voz. Llega, y los agentes de seguridad abren la reja.
Listo, ya está en la calle, bastón en mano. Camina hacia la esquina, rápido, con un audífono del iPhone en el oído. El cable va desde el bolsillo del pantalón hasta el oído izquierdo. Llega a la esquina, se detiene, hay un kiosko junto a la pared de la esquina misma, pero parece que no hay gente. Escucha que algunos carros se detienen, y luego siguen su circulación. Al tiempo que se quita el audífono para percibir mejor el entorno, oye que una dama de cierta edad le pregunta:
- Hijo, ¿vas a cruzar?.
- No, más bien, favor, ¿puede ayudarme a parar un taxi?.
- ¿A dónde le digo al taxista?.
Pregunta la señora.
- No, no se preocupe, yo le explico, ayúdeme solo a parar el taxi.
- Allá viene uno.
Indica la señora.
- Ven, acércate, aquí está el auto, ...
Se acerca, detecta con la mano el borde de la puerta con el vidrio de la ventana, y acercándose, pregunta:
- Amigo, voy aquí a la avenida Aviación, exactamente al centro comercial Ribpley. Cinco soles, qué dices.
- Ya, vamos ...
responde el taxista.
Sube al auto, y mientras cierra la puerta, le lanza un:
- Gracias señora.
El taxi se pone en marcha, y se coloca ambos audífonos para seguir escuchando el podcast de dommo. Oprime el botón de pausa en el audífono, y prosigue el podcast.
Dan unas vueltas por las calles de San borja, pues la avenida Aviación anda algo congestionada por las obras del tren eléctrico y más aún a esa hora.
Luego de rodear varias calles, sale a unas cuantas cuadras del coliseo Dibós, en plena Aviación.
- Ya estamos cerca, ...
anuncia el taxista.
- OK, un favor amigo, déjame lo más cerca que puedas de la puerta de Ripley.
- A ver, un momento, voy a acercarme a la vereda, ...
Listo. Estás a la misma altura de la puerta, pero tienes que bajar unas gradas.
- Chévere, gracias, cóbrate.
Baja del taxi, despliega el bastón, y avanza en forma recta, y mientras va calculando el inicio de las gradas en desenso, una voz le habla cerca:
- ¿Hacia donde te diriges?
- Sí, mire, estoy yendo a Ripley, me indica la puerta por favor?.
El tipo, un señor de edad mediana, lo coje del brazo y va a decir algo, pero él se adelanta en hablar, y mientras se suelta del señor con cuidado, y se toma de su codo, le dice:
- Yo le sigo, usted guíeme. Es la mejor forma de guiar a un invidente.
- Ha, sí ¿no?. No sabía, disculpe usted.
- No, no se preocupe.
Bajan las gradas, y se acercan a una puerta de cristal, el señor la empuja, e ingresan al recinto, en el que ya se percibe la típica música navideña de centro comercial.
Alguien se acerca y dice:
- Bienvenido a Ripley, ¿hacia dónde se dirige?.
- Vea, necesito hacer algunas compras, y quería saber si alguien del área de ventas pudiera ayudarme.
No agrega que es ciego, pues considera que no es necesario, que se nota prontamente.
- Ha sí, como no, espere un momento, voy a llamar a un agente.
- Suena el pitido característico de los equipos Nextel, y realiza un diálogo.
Él se ubica a un costado del paso de los clientes que entran y salen de la tienda. El podcast ya está por terminar, y decide que mientras espera, ha de revisar su correo en el iPhone. Pone pausa al reproductor de música del iPhone, pulsa el botón de inicio, y deslizando el dedo, abre la aplicación de Mail. Avanza sucesivamente con la yema del dedo, hasta llegar al botón Invox, y le pulsa dos taps para activarlo, y se abre la bandeja de entrada.
La música navideña de fondo continúa, y el personal de la entrada, que hasta entonces, ya se nota que es un agente de seguridad de la tienda, se acerca y dice:
- No se vaya a incomodar, ya está en camino la persona que lo va a guiar.
- OK, responde él, y sigue con la revisión de mails.
En este lugar, y con vigilantes cerca, no hay riesgo en realizar esta tarea. En la calle, sería más peligroso, sería una imprudencia andar jugando con el bicho electrónico de marras.
Nuevamente se acerca el vigilante y le dice:
- Ya viene la persona, tenga un poco de paciencia por favor.
Pero, resulta que paciencia es lo que menos le sobra al cliente invidente.
- Mmmm . amigo, un favor: sino, mientras que llega la persona, que me dé el alcance, necesito ir al Banco Ripley, voy a pagar mi cuenta del mes.
- Ha sí, un momento, que lo acompaño.
Se dirigen ambos hacia un segundo piso, lo conduce por entre personas que al parecer están haciendo cola, y lo pone frente a una ventanilla. En este caso, él ya no ha querido detenerse a hacerle alguna explicación de cómo se guía a un ciego.
- Este .... buenas tardes, voy a pagar mi cuenta del mes, por favor.
Una dama de edad mediana le responde, y pide nombre y número de DNI. Dicta el número, y le alcanza la tarjeta respectiva junto con el DNI.
Alcanza el importe correspondiente.
- Tanto había sido?.
Se pregunta, y espera el vuelto. Hace cuentas mentalmente, y recuerda que tiene otra tarjeta por pagar.
- Tome su cambio, aquí está su tarjeta, y su documento.
Antes de terminar de guardar el cambio en la billetera, pregunta:
- disculpe, un favor: vea, necesito hacer algunas compras en la tienda, y quisiera pedirle que me ayude a contactar a algún agente de ventas para que me guíe.
- Usted ¿va a hacer compras?.
- Sí, sucede que he venido solo, y no sé si fuera posible que me ayude alguien de la tienda.
- Un momento por favor, ..
indica la señora.
Ya es casi la una de la tarde, y debe regresar a la una y treinta a la oficina.
Un joven se acerca, y le indica que lo siga. Él lo toma del hombro, y se dirigen a la puerta de las oficinas, en dirección hacia la tienda.
- ¿Qué cosas desea comprar?, pregunta el joven.
- Ropa de caballeros, y prendas de niños. Dígame, es usted de alguna sección de la tienda?.
Le pregunta al joven.
- No, yo soy del banco, me han pedido que lo dirija a la sección de tienda.
- Ha, OK, gracias, muy amable su jefa, le replica él.
Se acercan a un área, donde la música cambia, al parecer una melodía de jazz, y se encuentran en medio de colgadores y ropas.
- Un favor, el señor va a hacer algunas compras, a ver si podría ayudarlo.
Es seguro que ya se encuentran en la zona de ropa en el Mall, y felizmente no hay mucha gente a esta hora.
- Buenas tardes, ¡qué tipo de ropa desea que le muestre?.
- Sí, bueno, mire, básicamente quiero comprar polos como para oficina, ¿me entiende?..
- Polos con cuello camisero, ¿dice usted? ...
replica la chica de la tienda.
- Sí, exactamente. ¿Puede por favor indicarme algunos modelos?.
- ¿Desea de color entero?, o con aplicaciones de colores.
De colores enteros por favor.
Felizmente no está con su esposa, pues a ellas les gusta probar y probar modelos, escoger precios, y tomarse toda la tarde en estos menesteres. Ahora no hay tiempo, y la verdad le da igual que sea de uno u otro color, pues, para oficina no se necesitan muchos diseños o modelos.
Luego de consultar un par de modelos a lo mucho, pregunta por el precio, y la señorita le dice que están en promoción, y con tarjeta salen dos por el precio de uno.
- Uff ... para algo bueno sirve esta bendita tarjeta. Está bien, llevo estos. ADemás, quería llevar un polo mas sport, uno de cuello redondo.
- Ha sí, como no. Sígame por aquí.
Llegan a una zona con más gente, y la chica, se acerca a otra señorita y le explica que el señor está buscando modelos de polos con cuello redondo.
- Sí, tenemos de las marcas tal y tal.
- OK, me llevo este. ¿De qué color me dice que es?.
- Es gris con un bordado delantero y bla bla bla.
- Listo, lo llevo. ¿Me guía a la caja por favor?.
Le pregunta a la señorita que inicialmente lo guiaba.
Mientras se dirijen a la caja, él le consulta a la joven.:
- Un favor, mire, luego de esto, necesitaba ir a la sección de niños a comprar una prenda sencilla.
- Bueno, hay que salir de esta sección y subir la escalera mecánica, responde la señorita de la tienda. Se acerca a la caja, le piden la tarjeta, DNI, etc. él indica que va a pagar con tarjeta.
- ¿en cuántas cuotas?.
- en las que quieras ... amigazo, piensa, mientras va escuchando la hora en el iPhone. Faltan unos diesisiete minutos.
- en tres cuotas, por favor.
Le indican para poner la firma, y ya quiere salir rápido. Le devuelven la tarjeta, el DNI, y le alcanzan la bolsa con su compra.
él retrocede, y se percata de que la señorita ya no está.
- Miércoles!. se dice a sí mismo, mientras piensa que la flaca se ha quitado. Está pensando en acercarse de nuevo a la caja, para indicarle si puede solicitar algún apoyo para que lo guíen, cuando una voz jovial se acerca, y le dice:
- ¿Ya va a salir, señor?.
- He, sí, este ...sí, mire, ¿puede guiarme a la sección niños, por favor?.
- Sí, como no. Mi amiga me pidió que lo ayudara, porque ella no podía dejar su módulo. Yo soy la que le atendió con los polos sports.
- Ha, sí, claro. Gracias por su amabilidad. Sucede que quiero comprarle un polito a mi hija, y he venido casi de emergencia.
- No se preocupe. pero, ¿desea ropa de niños?, o de niña.
- He, bueno, de niña. ¿Dígame, son secciones separadas?.
- Sí, claro. Hay una sección para niños, y otra sección exclusivamente para niñas.
- Mmmm mire, no tenía idea.
Se acercan a las escaleras mecánicas, y la chica le dice:
- Vamos a subir las escaleras, con cuidado por favor.
- Ha sí, no se preoucupe.
Ya casi cerca, él estira la mano hacia un costado, calculando más o menos, y descubre el pasamanos que se desliza suave hacia arriba. A partir de eso, ya calcula más o menos también, la grada que a unos diez o veinte centímetros de su pie, están apareciendo las gradas de la escala mecánica.
Tantea con el pie, y da un paso, mientras siente como la escalera lo impulsa suavemente hacia arriba. La señorita va casi a su lado, y le comenta cosas de la sección niños.
- Cásese de una vez y por todas amiga, cásese. Piensa él, mientras sonríe para sus adentros.
Salen de la escalera en el piso superior, y se dirijen hacia la zona de niñas, donde otra señorita recibe la consulta de la chica que lo guía:
- Hola, mira, el señor desea comprar algunas prendas para niñas. ¡Puedes ayudarlo por favor?.
- ¿Prendas?. No, solo una querida amiga. A menos que haya otra promoción de dos por uno con tarjeta., piensa mientras la señorita que los recibe, saluda y va explicando los modelos.
Pero, la consulta es puntual, según la indicación de su esposa:
- Mire, necesito llevar un polito de cuello redondo, de un color rosado, con algún detalle en el pechito.
- Claro que sí, aquí tenemos varios modelos, sígame por favor, dice la chica, mientras avanza unos pasos.
- Mami, yo te sigo, pero, si me tumbo tu kiosko, ya no es mi culpa, he?. Se dice mentalmente, mientras avanza un par de pasos, como para que la chica note que debe guiarlo o prestarle ayuda. Ella vuelve, y lo toma del brazo para acercarse a un mostrario con una cantidad indeterminable de prendas para niñas.
- De este modelo, ¡cuántos colores tiene?.
- Tenemos tres colores, no tengo rosado, tengo uno que es "palorrosa".
- "Palorrosa"?. Repite mentalmente, mientras recuerda que desde que no ve, ya hace casi veinte años, han salido unos colores particularmente exóticos. Palorrosa, conchevino, camello, ladrillo, etc.
- Bueno, está bien. Deme ese de color , he ... rosa.
Para entonces, ya está sonando en los parlantes del centro comercial, unos motivos navideños interpretados por Luis Miguel.
- ¡Porqué ponen estas cosas como música?. Porqué no nos conformamos con los Toribianitos?. Entre Luis Miguel y Los Toribianitos, prefiero a los Toribianitos, piensa mientras se dirije a la caja.
Ya en la caja, paga con tarjeta,
- En dos cuotas por favor,
y sigue el trámite respectivo.
Luego de pagar, y recibir la bolsa sellada, la chica de la sección niñas, lo lleva hacia el pasillo principal, y le dice que se espere unos instantes, que va a buscar a alguien que lo ayude. Mientras sigue sonando el mequetrefe de Luis Miguel cantando villancicos, piensa en que ahora sí que la tristeza. No hay nadie con él. Hay gente que pasa, que circula muy concentrada en lo suyo.
Saca el bastón, avanza un poco, pero se percata que es una sección de equipos de sonido, por la diversidad de música que hay en el ambiente. Retrocede, y percibe como un circuito por donde circula gente. No mucha, pero hay como un ritmo de ida y venida. Sigue por allí, y llega a una suerte de esquina, por donde se supone que habría que doblar. Lo que no tiene idea es de si esa ruta lo lleva hacia la salida, o lo interna más adentro en el centro comercial.
Está por avanzar, y alguien de atrás lo llama, y le dice que lo espere.
- Disculpe, me indicaron que lo guíe. Hacia donde desea dirigirse.
- Ha, bien. Necesito ir a la salida por favor. La salida a la avenida Aviación.
- OK, lo llevo, sígame.
Parece que los jóvenes tienen más sentido común para conducir a una persona ciega. Parece que su intuición es mayor que en las generaciones más avanzadas.
Sale a la calle, y ya calcula que le deben quedar unos siete o seis minutos para su hora de regreso de refrigerio.
- ¿Hacia donde se dirije?, pregunta el joven.
- Mira, necesito tomar un taxi, el que se encuentre más cercano por favor.
Se aproximan a uno que está estacionado unos metros más arriba en la avenida, y pregunta:
- Amigo, voy a la esquina de la avenida tal, con la avenida cuál. Seis soles, habla.
A los pocos minutos está sentado en el taxi, nuevamente con el iPhone en audición, tratando de saber si le ha llegado algún mail o hay alguna actualización interesante en su usuario de Facebook.
Llega a su centro de labores, entra rápido, llega al marcador, y se ha pasado un minuto y medio más o menos.
- No importa, no se va a caer el mundo por un minuto y medio, piensa mientras se dirije a la cafetería, a tomarse un jugo de papaya, escuchando, esta vez un podcast de literatura.

domingo, 19 de diciembre de 2010

1984 de George Orwell

La Mejor Época para Leerla.
Infolector Logo.
Según se señala en El blog de enriqe Dans, esta, la de Wikileaks y la lucha por la llamada "neutralidad en la Internet", es el mejor momento para leer o, en su caso, releer la obra de George Orwell, 1984. Consignamos parte de lo señalado por Enrique Dans:
No sé cuándo tuviste oportunidad de leer 1984 [Suceso.] , una de las obras más visionarias e impresionantes de George Orwell, pero tanto si no la has leído como si lo hiciste hace tiempo, te costará encontrar una mejor ocasión para hacerlo. No es un recurso retórico: si no leíste aún 1984, hazlo ya. Tienes librerías para comprarlo, infinidad de sitios de donde bajarlo cómodamente [Suceso.] , y unas vacaciones por delante. Si ya lo leíste, pero fue, como muchos, cuando te lo recomendaron en el bachillerato o hace años, es el momento de releerlo.

Para los usuarios de Infolector, descargar la novela 1984 de aquí.

martes, 14 de diciembre de 2010

La relevancia del enfoque de gestión en las bibliotecas

IFLA

Una de las mayores barreras con las que se enfrenta toda biblioteca, sobre todo en nuestras realidades latinoamericanas, es la noción disminuída y subvalorada que se incuba entre las instancias decisorias y ejecutivas de la institucionalidad estamental. SE trate de la institución de que se trate, universidad, ente público o gobierno local, por regla general se suele tomar a la biblioteca como una formalidad, como un símbolo de la actividad cultural. Y ese es el problema que finalmente se termina quedándose con la imagen, con el símbolo en lugar que con aquello que representa realmente, a saber, el espacio donde se realiza el acto, el encuentro entre el lector y los conocimientos.

Uno de los rasgos que grafican esta problemática vendría a constituir el vacío administrativo al que se le suele condenar a las bibliotecas; lo que se traduce en:

  • Sensibles reducciones en el presupuesto para la biblioteca.

  • Se asigna a personal no calificado, con las consecuencias que eso inplica.

  • Se exige resultados sin la debida correspondencia con los insumos propios de un servicio como el de la biblioteca.

En síntesis, una ausencia de gestión que debería ser el enfoque de partida en que descansa todo servicio documental. Los enfoques de animación cultural, de difusión o de altruismo no pueden ni deben inponerse al enfoque de gestión y de sistema que debiera exigir un servicio de biblioteca en cualqueira de sus modalidades, biblioteca universitaria, biblioteca especializada, biblioteca nacional, biblioteca pública, etc.

Todo lo cuál, por supuesto, alcanza en toda su magnitud a las bibliotecas accesibles cuyo enfoque documental y de sistema es el que permitirá asegurar el objetivo crucial de atender las necesidades de lectura a los usuarios con características específicas en el acceso a la lectura.

domingo, 12 de diciembre de 2010

'Elogio de la Lectura y la ficción' por Vargas Llosa

Discurso en la Recepción del Nóbel de Literatura.
Fundación Nóbel.

Foto: Reuters
Aprendí a leer a los cinco años, en la clase del hermano Justiniano, en el Colegio de la Salle, en Cochabamba (Bolivia). Es la cosa más importante que me ha pasado en la vida. Casi setenta años después recuerdo con nitidez cómo esa magia, traducir las palabras de los libros en imágenes, enriqueció mi vida, rompiendo las barreras del tiempo y del espacio y permitiéndome viajar con el capitán Nemo veinte mil leguas de viaje submarino, luchar junto a d'Artagnan, Athos, Portos y Aramís contra las intrigas que amenazan a la Reina en los tiempos del sinuoso Richelieu, o arrastrarme por las entrañas de París, convertido en Jean Valjean, con el cuerpo inerte de Marius a cuestas.
La lectura convertía el sueño en vida y la vida en sueño y ponía al alcance del pedacito de hombre que era yo el universo de la literatura. Mi madre me contó que las primeras cosas que escribí fueron continuaciones de las historias que leía pues me apenaba que se terminaran o quería enmendarles el final. Y acaso sea eso lo que me he pasado la vida haciendo sin saberlo: prolongando en el tiempo, mientras crecía, maduraba y envejecía, las historias que llenaron mi infancia de exaltación y de aventuras.
Me gustaría que mi madre estuviera aquí, ella que solía emocionarse y llorar leyendo los poemas de Amado Nervo y de Pablo Neruda, y también el abuelo Pedro, de gran nariz y calva reluciente, que celebraba mis versos, y el tío Lucho que tanto me animó a volcarme en cuerpo y alma a escribir aunque la literatura, en aquel tiempo y lugar, alimentara tan mal a sus cultores. Toda la vida he tenido a mi lado gentes así, que me querían y alentaban, y me contagiaban su fe cuando dudaba. Gracias a ellos y, sin duda, también, a mi terquedad y algo de suerte, he podido dedicar buena parte de mi tiempo a esta pasión, vicio y maravilla que es escribir, crear una vida paralela donde refugiarnos contra la adversidad, que vuelve natural lo extraordinario y extraordinario lo natural, disipa el caos, embellece lo feo, eterniza el instante y torna la muerte un espectáculo pasajero.
No era fácil escribir historias. Al volverse palabras, los proyectos se marchitaban en el papel y las ideas e imágenes desfallecían. ¿Cómo reanimarlos? Por fortuna, allí estaban los maestros para aprender de ellos y seguir su ejemplo. Flaubert me enseñó que el talento es una disciplina tenaz y una larga paciencia. Faulkner, que es la forma -la escritura y la estructura- lo que engrandece o empobrece los temas. Martorell, Cervantes, Dickens, Balzac, Tolstoi, Conrad, Thomas Mann, que el número y la ambición son tan importantes en una novela como la destreza estilística y la estrategia narrativa. Sartre, que las palabras son actos y que una novela, una obra de teatro, un ensayo, comprometidos con la actualidad y las mejores opciones, pueden cambiar el curso de la historia. Camus y Orwell, que una literatura desprovista de moral es inhumana y Malraux que el heroísmo y la épica cabían en la actualidad tanto como en el tiempo de los argonautas, la Odisea y la Ilíada.
Si convocara en este discurso a todos los escritores a los que debo algo o mucho sus sombras nos sumirían en la oscuridad. Son innumerables. Además de revelarme los secretos del oficio de contar, me hicieron explorar los abismos de lo humano, admirar sus hazañas y horrorizarme con sus desvaríos. Fueron los amigos más serviciales, los animadores de mi vocación, en cuyos libros descubrí que, aun en las peores circunstancias, hay esperanzas y que vale la pena vivir, aunque fuera sólo porque sin la vida no podríamos leer ni fantasear historias.
Algunas veces me pregunté si en países como el mío, con escasos lectores y tantos pobres, analfabetos e injusticias, donde la cultura era privilegio de tan pocos, escribir no era un lujo solipsista. Pero estas dudas nunca asfixiaron mi vocación y seguí siempre escribiendo, incluso en aquellos períodos en que los trabajos alimenticios absorbían casi todo mi tiempo. Creo que hice lo justo, pues, si para que la literatura florezca en una sociedad fuera requisito alcanzar primero la alta cultura, la libertad, la prosperidad y la justicia, ella no hubiera existido nunca. Por el contrario, gracias a la literatura, a las conciencias que formó, a los deseos y anhelos que inspiró, al desencanto de lo real con que volvemos del viaje a una bella fantasía, la civilización es ahora menos cruel que cuando los contadores de cuentos comenzaron a humanizar la vida con sus fábulas. Seríamos peores de lo que somos sin los buenos libros que leímos, más conformistas, menos inquietos e insumisos y el espíritu crítico, motor del progreso, ni siquiera existiría. Igual que escribir, leer es protestar contra las insuficiencias de la vida. Quien busca en la ficción lo que no tiene, dice, sin necesidad de decirlo, ni siquiera saberlo, que la vida tal como es no nos basta para colmar nuestra sed de absoluto, fundamento de la condición humana, y que debería ser mejor. Inventamos las ficciones para poder vivir de alguna manera las muchas vidas que quisiéramos tener cuando apenas disponemos de una sola.
Sin las ficciones seríamos menos conscientes de la importancia de la libertad para que la vida sea vivible y del infierno en que se convierte cuando es conculcada por un tirano, una ideología o una religión. Quienes dudan de que la literatura, además de sumirnos en el sueño de la belleza y la felicidad, nos alerta contra toda forma de opresión, pregúntense por qué todos los regímenes empeñados en controlar la conducta de los ciudadanos de la cuna a la tumba, la temen tanto que establecen sistemas de censura para reprimirla y vigilan con tanta suspicacia a los escritores independientes. Lo hacen porque saben el riesgo que corren dejando que la imaginación discurra por los libros, lo sediciosas que se vuelven las ficciones cuando el lector coteja la libertad que las hace posibles y que en ellas se ejerce, con el oscurantismo y el miedo que lo acechan en el mundo real. Lo quieran o no, lo sepan o no, los fabuladores, al inventar historias, propagan la insatisfacción, mostrando que el mundo está mal hecho, que la vida de la fantasía es más rica que la de la rutina cotidiana. Esa comprobación, si echa raíces en la sensibilidad y la conciencia, vuelve a los ciudadanos más difíciles de manipular, de aceptar las mentiras de quienes quisieran hacerles creer que, entre barrotes, inquisidores y carceleros viven más seguros y mejor.
La buena literatura tiende puentes entre gentes distintas y, haciéndonos gozar, sufrir o sorprendernos, nos une por debajo de las lenguas, creencias, usos, costumbres y prejuicios que nos separan. Cuando la gran ballena blanca sepulta al capitán Ahab en el mar, se encoge el corazón de los lectores idénticamente en Tokio, Lima o Tombuctú. Cuando Emma Bovary se traga el arsénico, Anna Karenina se arroja al tren y Julián Sorel sube al patíbulo, y cuando, en El Sur, el urbano doctor Juan Dahlmann sale de aquella pulpería de la pampa a enfrentarse al cuchillo de un matón, o advertimos que todos los pobladores de Comala, el pueblo de Pedro Páramo, están muertos, el estremecimiento es semejante en el lector que adora a Buda, Confucio, Cristo, Alá o es un agnóstico, vista saco y corbata, chilaba, kimono o bombachas. La literatura crea una fraternidad dentro de la diversidad humana y eclipsa las fronteras que erigen entre hombres y mujeres la ignorancia, las ideologías, las religiones, los idiomas y la estupidez.
Como todas las épocas han tenido sus espantos, la nuestra es la de los fanáticos, la de los terroristas suicidas, antigua especie convencida de que matando se gana el paraíso, que la sangre de los inocentes lava las afrentas colectivas, corrige las injusticias e impone la verdad sobre las falsas creencias. Innumerables víctimas son inmoladas cada día en diversos lugares del mundo por quienes se sienten poseedores de verdades absolutas. Creíamos que, con el desplome de los imperios totalitarios, la convivencia, la paz, el pluralismo, los derechos humanos, se impondrían y el mundo dejaría atrás los holocaustos, genocidios, invasiones y guerras de exterminio. Nada de eso ha ocurrido. Nuevas formas de barbarie proliferan atizadas por el fanatismo y, con la multiplicación de armas de destrucción masiva, no se puede excluir que cualquier grupúsculo de enloquecidos redentores provoque un día un cataclismo nuclear. Hay que salirles al paso, enfrentarlos y derrotarlos. No son muchos, aunque el estruendo de sus crímenes retumbe por todo el planeta y nos abrumen de horror las pesadillas que provocan. No debemos dejarnos intimidar por quienes quisieran arrebatarnos la libertad que hemos ido conquistando en la larga hazaña de la civilización. Defendamos la democracia liberal, que, con todas sus limitaciones, sigue significando el pluralismo político, la convivencia, la tolerancia, los derechos humanos, el respeto a la crítica, la legalidad, las elecciones libres, la alternancia en el poder, todo aquello que nos ha ido sacando de la vida feral y acercándonos -aunque nunca llegaremos a alcanzarla- a la hermosa y perfecta vida que finge la literatura, aquella que sólo inventándola, escribiéndola y leyéndola podemos merecer. Enfrentándonos a los fanáticos homicidas defendemos nuestro derecho a soñar y a hacer nuestros sueños realidad.
En mi juventud, como muchos escritores de mi generación, fui marxista y creí que el socialismo sería el remedio para la explotación y las injusticias sociales que arreciaban en mi país, América Latina y el resto del Tercer Mundo. Mi decepción del estatismo y el colectivismo y mi tránsito hacia el demócrata y el liberal que soy -que trato de ser- fue largo, difícil, y se llevó a cabo despacio y a raíz de episodios como la conversión de la Revolución Cubana, que me había entusiasmado al principio, al modelo autoritario y vertical de la Unión Soviética, el testimonio de los disidentes que conseguía escurrirse entre las alambradas del Gulag, la invasión de Checoeslovaquia por los países del Pacto de Varsovia, y gracias a pensadores como Raymond Aron, Jean-François Revel, IsaiahBerlin y Karl Popper, a quienes debo mi revalorización de la cultura democrática y de las sociedades abiertas. Esos maestros fueron un ejemplo de lucidez y gallardía cuando la intelligentsiade Occidente parecía, por frivolidad u oportunismo, haber sucumbido al hechizo del socialismo soviético, o, peor todavía, al aquelarre sanguinario de la revolución cultural china.
De niño soñaba con llegar algún día a París porque, deslumbrado con la literatura francesa, creía que vivir allí y respirar el aire que respiraron Balzac, Stendhal, Baudelaire, Proust, me ayudaría a convertirme en un verdadero escritor, que si no salía del Perú sólo sería un seudo escritor de días domingos y feriados. Y la verdad es que debo a Francia, a la cultura francesa, enseñanzas inolvidables, como que la literatura es tanto una vocación como una disciplina, un trabajo y una terquedad. Viví allí cuando Sartre y Camus estaban vivos y escribiendo, en los años de Ionesco, Beckett, Bataille y Cioran, del descubrimiento del teatro de Brecht y el cine de Ingmar Bergman, el TNP de Jean Vilar y el Odéon de Jean Louis Barrault, de la Nouvelle Vague y le Nouveau Roman y los discursos, bellísimas piezas literarias, de André Malraux, y, tal vez, el espectáculo más teatral de la Europa de aquel tiempo, las conferencias de prensa y los truenos olímpicos del general de Gaulle. Pero, acaso, lo que más le agradezco a Francia sea el descubrimiento de América Latina. Allí aprendí que el Perú era parte de una vasta comunidad a la que hermanaban la historia, la geografía, la problemática social y política, una cierta manera de ser y la sabrosa lengua en que hablaba y escribía. Y que en esos mismos años producía una literatura novedosa y pujante. Allí leí a Borges, a Octavio Paz, Cortázar, García Márquez, Fuentes, Cabrera Infante, Rulfo, Onetti, Carpentier, Edwards, Donoso y muchos otros, cuyos escritos estaban revolucionando la narrativa en lengua española y gracias a los cuales Europa y buena parte del mundo descubrían que América Latina no era sólo el continente de los golpes de Estado, los caudillos de opereta, los guerrilleros barbudos y las maracas del mambo y el chachachá, sino también ideas, formas artísticas y fantasías literarias que trascendían lo pintoresco y hablaban un lenguaje universal.
De entonces a esta época, no sin tropiezos y resbalones, América Latina ha ido progresando, aunque, como decía el verso de César Vallejo, todavía Hay, hermanos, muchísimo que hacer. Padecemos menos dictaduras que antaño, sólo Cuba y su candidata a secundarla, Venezuela, y algunas seudodemocracias populistas y payasas, como las de Bolivia y Nicaragua. Pero en el resto del continente, mal que mal, la democracia está funcionando, apoyada en amplios consensos populares, y, por primera vez en nuestra historia, tenemos una izquierda y una derecha que, como en Brasil, Chile, Uruguay, Perú, Colombia, República Dominicana, México y casi todo Centroamérica, respetan la legalidad, la libertad de crítica, las elecciones y la renovación en el poder. Ése es el buen camino y, si persevera en él, combate la insidiosa corrupción y sigue integrándose al mundo, América Latina dejará por fin de ser el continente del futuro y pasará a serlo del presente.
Nunca me he sentido un extranjero en Europa, ni, en verdad, en ninguna parte. En todos los lugares donde he vivido, en París, en Londres, en Barcelona, en Madrid, en Berlín, en Washington, Nueva York, Brasil o la República Dominicana, me sentí en mi casa. Siempre he hallado una querencia donde podía vivir en paz y trabajando, aprender cosas, alentar ilusiones, encontrar amigos, buenas lecturas y temas para escribir. No me parece que haberme convertido, sin proponérmelo, en un ciudadano del mundo, haya debilitado eso que llaman "las raíces", mis vínculos con mi propio país -lo que tampoco tendría mucha importancia-, porque, si así fuera, las experiencias peruanas no seguirían alimentándome como escritor y no asomarían siempre en mis historias, aun cuando éstas parezcan ocurrir muy lejos del Perú. Creo que vivir tanto tiempo fuera del país donde nací ha fortalecido más bien aquellos vínculos, añadiéndoles una perspectiva más lúcida, y la nostalgia, que sabe diferenciar lo adjetivo y lo sustancial y mantiene reverberando los recuerdos. El amor al país en que uno nació no puede ser obligatorio, sino, al igual que cualquier otro amor, un movimiento espontáneo del corazón, como el que une a los amantes, a padres e hijos, a los amigos entre sí.
Al Perú yo lo llevo en las entrañas porque en él nací, crecí, me formé, y viví aquellas experiencias de niñez y juventud que modelaron mi personalidad, fraguaron mi vocación, y porque allí amé, odié, gocé, sufrí y soñé. Lo que en él ocurre me afecta más, me conmueve y exaspera más que lo que sucede en otras partes. No lo he buscado ni me lo he impuesto, simplemente es así. Algunos compatriotas me acusaron de traidor y estuve a punto de perder la ciudadanía cuando, durante la última dictadura, pedí a los gobiernos democráticos del mundo que penalizaran al régimen con sanciones diplomáticas y económicas, como lo he hecho siempre con todas las dictaduras, de cualquier índole, la de Pinochet, la de Fidel Castro, la de los talibanes en Afganistán, la de los imanes de Irán, la del apartheid de Africa del Sur, la de los sátrapas uniformados de Birmania (hoy Myanmar). Y lo volvería a hacer mañana si -el destino no lo quiera y los peruanos no lo permitan- el Perú fuera víctima una vez más de un golpe de estado que aniquilara nuestra frágil democracia. Aquella no fue la acción precipitada y pasional de un resentido, como escribieron algunos polígrafos acostumbrados a juzgar a los demás desde su propia pequeñez. Fue un acto coherente con mi convicción de que una dictadura representa el mal absoluto para un país, una fuente de brutalidad y corrupción y de heridas profundas que tardan mucho en cerrar, envenenan su futuro y crean hábitos y prácticas malsanas que se prolongan a lo largo de las generaciones demorando la reconstrucción democrática. Por eso, las dictaduras deben ser combatidas sin contemplaciones, por todos los medios a nuestro alcance, incluidas las sanciones económicas. Es lamentable que los gobiernos democráticos, en vez de dar el ejemplo, solidarizándose con quienes, como las Damas de Blanco en Cuba, los resistentes venezolanos, o Aung San Suu Kyi y Liu Xiaobo, que se enfrentan con temeridad a las dictaduras que sufren, se muestren a menudo complacientes no con ellos sino con sus verdugos. Aquellos valientes, luchando por su libertad, también luchan por la nuestra.
Un compatriota mío, José María Arguedas, llamó al Perú el país de "todas las sangres". No creo que haya fórmula que lo defina mejor. Eso somos y eso llevamos dentro todos los peruanos, nos guste o no: una suma de tradiciones, razas, creencias y culturas procedentes de los cuatro puntos cardinales. A mí me enorgullece sentirme heredero de las culturas prehispánicas que fabricaron los tejidos y mantos de plumas de Nazca y Paracas y los ceramios mochicas o incas que se exhiben en los mejores museos del mundo, de los constructores de Machu Picchu, el Gran Chimú, Chan Chan, Kuelap, Sipán, las huacas de La Bruja y del Sol y de la Luna, y de los españoles que, con sus alforjas, espadas y caballos, trajeron al Perú a Grecia, Roma, la tradición judeo-cristiana, el Renacimiento, Cervantes, Quevedo y Góngora, y la lengua recia de Castilla que los Andes dulcificaron. Y de que con España llegara también el Àfrica con su reciedumbre, su música y su efervescente imaginación a enriquecer la heterogeneidad peruana. Si escarbamos un poco descubrimos que el Perú, como el Aleph de Borges, es en pequeño formato el mundo entero. ¡Qué extraordinario privilegio el de un país que no tiene una identidad porque las tiene todas!
La conquista de América fue cruel y violenta, como todas las conquistas, desde luego, y debemos criticarla, pero sin olvidar, al hacerlo, que quienes cometieron aquellos despojos y crímenes fueron, en gran número, nuestros bisabuelos y tatarabuelos, los españoles que fueron a América y allí se acriollaron, no los que se quedaron en su tierra. Aquellas críticas, para ser justas, deben ser una autocrítica. Porque, al independizarnos de España, hace doscientos años, quienes asumieron el poder en las antiguas colonias, en vez de redimir al indio y hacerle justicia por los antiguos agravios, siguieron explotándolo con tanta codicia y ferocidad como los conquistadores, y, en algunos países, diezmándolo y exterminándolo. Digámoslo con toda claridad: desde hace dos siglos la emancipación de los indígenas es una responsabilidad exclusivamente nuestra y la hemos incumplido. Ella sigue siendo una asignatura pendiente en toda América Latina. No hay una sola excepción a este oprobio y vergüenza.
Quiero a España tanto como al Perú y mi deuda con ella es tan grande como el agradecimiento que le tengo. Si no hubiera sido por España jamás hubiera llegado a esta tribuna, ni a ser un escritor conocido, y tal vez, como tantos colegas desafortunados, andaría en el limbo de los escribidores sin suerte, sin editores, ni premios, ni lectores, cuyo talento acaso -triste consuelo- descubriría algún día la posteridad. En España se publicaron todos mis libros, recibí reconocimientos exagerados, amigos como Carlos Barral y Carmen Balcells y tantos otros se desvivieron porque mis historias tuvieran lectores. Y España me concedió una segunda nacionalidad cuando podía perder la mía. Jamás he sentido la menor incompatibilidad entre ser peruano y tener un pasaporte español porque siempre he sentido que España y el Perú son el anverso y el reverso de una misma cosa, y no sólo en mi pequeña persona, también en realidades esenciales como la historia, la lengua y la cultura.
De todos los años que he vivido en suelo español, recuerdo con fulgor los cinco que pasé en la querida Barcelona a comienzos de los años setenta. La dictadura de Franco estaba todavía en pie y aún fusilaba, pero era ya un fósil en hilachas, y, sobre todo en el campo de la cultura, incapaz de mantener los controles de antaño. Se abrían rendijas y resquicios que la censura no alcanzaba a parchar y por ellas la sociedad española absorbía nuevas ideas, libros, corrientes de pensamiento y valores y formas artísticas hasta entonces prohibidos por subversivos. Ninguna ciudad aprovechó tanto y mejor que Barcelona este comienzo de apertura ni vivió una efervescencia semejante en todos los campos de las ideas y la creación. Se convirtió en la capital cultural de España, el lugar donde había que estar para respirar el anticipo de la libertad que se vendría. Y, en cierto modo, fue también la capital cultural de América Latina por la cantidad de pintores, escritores, editores y artistas procedentes de los países latinoamericanos que allí se instalaron, o iban y venían a Barcelona, porque era donde había que estar si uno quería ser un poeta, novelista, pintor o compositor de nuestro tiempo. Para mí, aquellos fueron unos años inolvidables de compañerismo, amistad, conspiraciones y fecundo trabajo intelectual. Igual que antes París, Barcelona fue una Torre de Babel, una ciudad cosmopolita y universal, donde era estimulante vivir y trabajar, y donde, por primera vez desde los tiempos de la guerra civil, escritores españoles y latinoamericanos se mezclaron y fraternizaron, reconociéndose dueños de una misma tradición y aliados en una empresa común y una certeza: que el final de la dictadura era inminente y que en la España democrática la cultura sería la protagonista principal.
Aunque no ocurrió así exactamente, la transición española de la dictadura a la democracia ha sido una de las mejores historias de los tiempos modernos, un ejemplo de cómo, cuando la sensatez y la racionalidad prevalecen y los adversarios políticos aparcan el sectarismo en favor del bien común, pueden ocurrir hechos tan prodigiosos como los de las novelas del realismo mágico. La transición española del autoritarismo a la libertad, del subdesarrollo a la prosperidad, de una sociedad de contrastes económicos y desigualdades tercermundistas a un país de clases medias, su integración a Europa y su adopción en pocos años de una cultura democrática, ha admirado al mundo entero y disparado la modernización de España. Ha sido para mí una experiencia emocionante y aleccionadora vivirla de muy cerca y a ratos desde dentro. Ojalá que los nacionalismos, plaga incurable del mundo moderno y también de España, no estropeen esta historia feliz.
Detesto toda forma de nacionalismo, ideología -o, más bien, religión- provinciana, de corto vuelo, excluyente, que recorta el horizonte intelectual y disimula en su seno prejuicios étnicos y racistas, pues convierte en valor supremo, en privilegio moral y ontológico, la circunstancia fortuita del lugar de nacimiento. Junto con la religión, el nacionalismo ha sido la causa de las peores carnicerías de la historia, como las de las dos guerras mundiales y la sangría actual del Medio Oriente. Nada ha contribuido tanto como el nacionalismo a que América Latina se haya balcanizado, ensangrentado en insensatas contiendas y litigios y derrochado astronómicos recursos en comprar armas en vez de construir escuelas, bibliotecas y hospitales.
No hay que confundir el nacionalismo de orejeras y su rechazo del "otro", siempre semilla de violencia, con el patriotismo, sentimiento sano y generoso, de amor a la tierra donde uno vio la luz, donde vivieron sus ancestros y se forjaron los primeros sueños, paisaje familiar de geografías, seres queridos y ocurrencias que se convierten en hitos de la memoria y escudos contra la soledad. La patria no son las banderas ni los himnos, ni los discursos apodícticos sobre los héroes emblemáticos, sino un puñado de lugares y personas que pueblan nuestros recuerdos y los tiñen de melancolía, la sensación cálida de que, no importa donde estemos, existe un hogar al que podemos volver.
El Perú es para mí una Arequipa donde nací pero nunca viví, una ciudad que mi madre, mis abuelos y mis tíos me enseñaron a conocer a través de sus recuerdos y añoranzas, porque toda mi tribu familiar, como suelen hacer los arequipeños, se llevó siempre a la Ciudad Blanca con ella en su andariega existencia. Es la Piura del desierto, el algarrobo y el sufrido burrito, al que los piuranos de mi juventud llamaban "el pie ajeno" -lindo y triste apelativo-, donde descubrí que no eran las cigüeñas las que traían los bebes al mundo sino que los fabricaban las parejas haciendo unas barbaridades que eran pecado mortal. Es el Colegio San Miguel y el Teatro Variedades donde por primera vez vi subir al escenario una obrita escrita por mí. Es la esquina de Diego Ferré y Colón, en el Miraflores limeño -la llamábamos el Barrio Alegre-, donde cambié el pantalón corto por el largo, fumé mi primer cigarrillo, aprendí a bailar, a enamorar y a declararme a las chicas. Es la polvorienta y temblorosa redacción del diario La Crónica donde, a mis dieciséis años, velé mis primeras armas de periodista, oficio que, con la literatura, ha ocupado casi toda mi vida y me ha hecho, como los libros, vivir más, conocer mejor el mundo y frecuentar a gente de todas partes y de todos los registros, gente excelente, buena, mala y execrable. Es el Colegio Militar Leoncio Prado, donde aprendí que el Perú no era el pequeño reducto de clase media en el que yo había vivido hasta entonces confinado y protegido, sino un país grande, antiguo, enconado, desigual y sacudido por toda clase de tormentas sociales. Son las células clandestinas de Cahuide en las que con un puñado de sanmarquinos preparábamos la revolución mundial. Y el Perú son mis amigos y amigas del Movimiento Libertad con los que por tres años, entre las bombas, apagones y asesinatos del terrorismo, trabajamos en defensa de la democracia y la cultura de la libertad.
El Perú es Patricia, la prima de naricita respingada y carácter indomable con la que tuve la fortuna de casarme hace 45 años y que todavía soporta las manías, neurosis y rabietas que me ayudan a escribir. Sin ella mi vida se hubiera disuelto hace tiempo en un torbellino caótico y no hubieran nacido Àlvaro, Gonzalo, Morgana ni los seis nietos que nos prolongan y alegran la existencia. Ella hace todo y todo lo hace bien. Resuelve los problemas, administra la economía, pone orden en el caos, mantiene a raya a los periodistas y a los intrusos, defiende mi tiempo, decide las citas y los viajes, hace y deshace las maletas, y es tan generosa que, hasta cuando cree que me riñe, me hace el mejor de los elogios: "Mario, para lo único que tú sirves es para escribir".

Por razones de espacio en el post, dejamos el enlace de descarga del discuso completo en PDF.

Las Nuevas Características de la Computación Actual

Movilidad e Interacción Táctil como Rasgos Principales.
NotionInk.
El salto de la computación local a la computación en la nube, vale decir al uso de aplicaciones y contenidos remotamente, imponen a su vez, la necesidad de determinado tipo de dispositivo, de hardware que se ajuste a tal tipo de interacción.
Si hasta hace no mucho el paradigma de la interacción informática era la computadora de escritorio, sea la PC o la MAC, de un tiempo a esta parte el escenario ha migrado hacia un paradigma de equipos móviles. No solo ya las portátiles tradicionales, sino las conocidas como Netbooks, y más recientemente las llamadas tablets. Incluyendo por cierto, a los teléfonos inteligentes como los BlackBerry, el iPhone, los teléfonos con Android, y dentro de no mucho, la versión actualizada de las Palm, ahora de HP.
Si antes las características técnicas de las computadoras giraban alrededor del escritorio, del monitor, de la cantidad de GB de memoria, actualmente dichas características giran alrededor de los pixeles de la pantalla, de los pixeles de la cámara, del tipo de conexión a la red, etc.
Sobre el índice de accesibilidad, aún no disponemos de criterios fijos para su valoración. Solo podemos indicar que de los sistemas operativos para dispositivos móviles que más han avanzado en el tema de la accesibilidad para usuarios con discapacidad, son el iOS y Android.
Consignamos el siguiente listado de características técnicas de una tablet estándar:
Pantalla de 10 pulgadas, transflectiva LCD PixelQi, 1024×600 pixeles
Sistema Operativo: Android, Ubuntu, Chromium
CPU: nVidia Tegra 2 de doble núcleo a 1 GHz
Memoria: 1 Gbyte DDR2 RAM; 1 GByte SLC; 8 GByte memoria Flash (configuración mínima)
Pantalla multitáctil 1024×600 PixelQi
Browser: Firefox/Chrome
Puertos: HDMI a 1080p, USB 2.0 x 2; Mini USB; Micro SD, SIM Card, Conector DC
Sensores: acelerómetro 3-ejes; sensor de luz de ambiente; GPS; Brújula digital
Cámara: 32 Megapixeles autofocus
Batería: 16 horas; 160 horas con la retroiluminación apagada
Conexión inalámbrica: WiFi, 3G, BlueTooth
Peso: 1.7 libras
Otros: touchpad
Multitareas: Sí
Soporte a Flash 10.1: Sí.

Incluir la URL en el Buscador de google

Posicionar tu sitio en la Internet.
Google AddURL.
Para todos los dueños o administradores de sitios Web y Blogs, que alguna vez deben haberse planteado el cómo hacer crecer el tráfico de visitas a su sitio, aquí compartimos esta herramienta propuesta por el propio google.
Envía tu sitio, es una herramienta de Google que nos permite incluir el URL de nuestro sitio Web o blog personal, agregándo además, algunos términos descriptivos del sitio. Es tan simple, como copiar el URL de nuestro sitio, pegarlo en el cuadro de texto respectivo, y a continuación, si se desea, llenar una breve descripción de nuestro sitio, y enviar.
Luego de enviado nuestra dirección correspondiente, 'Envíe su Sitio' nos da este mensaje de confirmación:
Gracias
Su URL se ha añadido correctamente.
La URL de su sitio se ha añadido correctamente a nuestra lista de URL que deberán rastrearse. Por favor, tenga en cuenta que no añadimos a nuestro índice todas las URL que recibimos y que no podemos hacer ninguna predicción ni garantizarle cuándo o si efectivamente aparecerán.

dejamos aquí, el enlace de 'Envíe su Sitio'.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Primer Juego accesible Desarrollado por Programador ciego

Jónatan Chacón y su épica con Apple.
Applesfera.
Para los usuarios de apple y para la comunidad de usuarios de tecnologías accesible en español, Jónatan Chacón es un nombre bastante conocido. él es ciego como mucho de nosotros, y ante todo, es un geek, un friky de la tecnología. Vale decir, un adepto en cuerpo y alma a las virtualidades y encantos de los gadgets y la electrónica de consumo en general, pero, en específico, de la accesibilidad para personas ciegas.
En su blog personal, Programar a Ciegas, comparte todo tipo de información especializada en accesibilidad para ciegos, y gran parte de esa información, orientada al entorno Aple. En una nota reciente aparecida en applesfera, se comenta una de las últimas proezas de Jónatan: ha producido, ha desarrollado un juego para iPhone, pero con accesibilidad para usuarios con discapacidad visual.
Creo alguna vez haber jugado este juego, en la era del Pin Ball. Pero, de seguro la mayoría de usuarios del windows lo conocen, porque viene por defecto en el sistema. Sin embargo, para nosotros los usuarios con discapacidad visual, nos ha sido esquivo hasta ahora. Jónatan Chacón nos viene a sacar de la oscuridad con este extraordinario desarrollo en iOS para el iPhone, y muy probablemente dentro de no mucho, para el entorno MAC.
Consignamos aquí, parte de una entrevista que brinda Jónatan Chacón para Faq-Mac:
¿Cómo está el mercado de juegos accesibles en la App Store de Apple?
Pues, aunque hay bastantes aplicaciones que cumplen mínimos de accesibilidad, los juegos no son una categoría de ellas.
Las aplicaciones con botones, cuadros de textos y demás son propensas a ser accesibles gracias a la capa de accesibilidad de Cocoa touch. A menos que el desarrollador use controles no estándares o no los use de forma apropiada, la aplicación será más o menos accesible. En cambio, en los juegos, los controles no son estándares y, por supuesto, no se utilizan de forma habitual. Ahí es donde entra la librería de accesibilidad de Apple, que es poco conocida.
En la actualidad no podemos considerar ni el 1% de los juegos de la appStore como accesibles. Entiéndase accesible para ciegos, sordos, discapacitados motóricos o discapacitados cognitivos.
¿Qué te motivó a desarrollar aplicaciones accesibles?
[buscaminas_accesible.png.]Para mi el iPhone fue el cacharro definitivo. He apoyado el uso de superficies táctiles como interfaces accesibles desde el año 2002. Fui criticado por ello por mucha gente pero pensaba y pienso que cualquier interfaz puede ser accesible con un producto de apoyo apropiado y las pantallas táctiles son la mejor solución para dispositivos pequeños.
En Junio de 2009 conseguí mi primer iPhone 3GS. Una larga espera ya que sabía desde enero que este modelo iba a ser accesible. Nada más tenerlo pude disfrutar de él sin necesidad de instalar nada, sin necesidad de pedir ayuda. Era el primer teléfono diseñado para todos, ciegos, viejos, niños, freakies, gueeks, etc.
Comencé a instalar cosas, muchas satisfacciones y decepciones. Acceso a Twitter, Facebook, LinkedIn, GoogleReader, etc... pero al llegar al apartado de juegos, nada de nada. Alguna aplicación en inglés basada en web y poco más. Comprendí que las anteriores aplicaciones eran accesibles gracias a Apple y no a los desarrolladores ya que pocos son los que se preocupan por la accesibilidad, bien sea por desconocimiento o por desinterés.
He contactado con varios desarrolladores para reportar errores y, normalmente, aceptan las críticas y resuelven los problemas. Ejemplos son aplicaciones como DropBox o
Echofon, que han hecho cambios importantes en su interfaz para que los usuarios ciegos podamos utilizar dichas aplicaciones. Otras aplicaciones hacen cambios mínimos porque hay demasiadas barreras.
En el caso de los juegos hay demasiadas barreras y muchos desarrolladores no pueden asumir cambiar todo su juego.
El tiempo de ocio es muy importante para las personas y pensé que el iPhone puede ser un buen canal para que las personas con discapacidad puedan entretenerse. Hay muy pocos juegos para ciegos, sean en PC, Mac, Linux u otras plataformas electrónicas. Los juegos específicos, de tablero o electrónicos, suelen ser carísimos porque van dirigidos a un público minoritario. Además, no están disponibles en todas partes. En España tenemos suerte porque la ONCE posee un catalogo de productos para ciegos pero en otros paises esto no es así.
El iPhone ofrece la posibilidad de que cualquier persona con discapacidad adquiera el producto y lo disfrute.
En el futuro pretendo aprovechar las capacidades de Game center para que las personas con discapacidad, además de jugar, puedan compartir y socializar a través del juego. Es una buena terapia de integración.
¿Porqué un buscaminas?
Decidí programar algo sencillo que me permitiese estudiar y aprender Cocoa touch y Objective-C sin complicarme demasiado en el algoritmo de juego. Además, me encanta el
buscaminas, permite descargar adrenalina sin tener que sudar. Confieso que el sonido de la bomba está más alto que el resto para dar pequeños sustos, así el jugador recibe un pequeño empujón para motivarse a ganar.
¿A que retos te enfrentaste?
Mañana viernes, día 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad. Es éste un día dedicado a la toma de conciencia. Numerosas jornadas pretenden sensibilizar y hacer reflexionar a la población sobre la importancia de integrar a este colectivo de personas en todas las facetas de la vida.
Pues, en primer lugar, Objective-C es más raro que un perro verde. Por suerte para mi programo en C++ y smalltalk. Objective-c es un gazpacho de ambos así que sólo tuve que estudiar Cocoa y acostumbrarme un poco a la gramática del lenguaje. El problema es que muchas veces se me iba la pinza y, en una sesión de picar código tenía que rehacer todo el trabajo porque me daba cuenta de que estaba programando en C o python. Cosas de tocar muchos palos a la vez.
El gran problema fue el diseño del interfaz. XCode tiene pocas barreras de accesibilidad, alguna hay pero no son graves. En cambio, interface builder y su manía de hacerlo todo con drag and drop es una barrera muy grave para los usuarios de Mac que usan VoiceOver, el lector de pantallas para Mac OS.
He hecho muchos experimentos con interface builder, encontré la forma de diseñar un interfaz con esta herramienta.
Hice un tres-en-raya para Mac y me tiré una hora para colocar un tablero de 3X3 casillas así que me até la manta a la cabeza y decidí diseñar todo el juego, incluido el interfaz, desde código tocando Xcode sin usar interface builder. ¿Más lento? para mi no, además, tengo más control sobre el diseño. He hecho que todo el diseño sea elástico. Mi esposa me ha ayudado mucho con los gráficos, hechos por ella, y verificando que el diseño elástico no se fuese de rango o saliese demasiado estirado. Ella ha tenido mucha paciencia y tiene el cielo ganado conmigo por aguantarme, jeje.

miércoles, 8 de diciembre de 2010

El Post Número 100 de Infolector

A menos de un año en línea.
Infolector Blog.
Con este post completamos el primer centenar de posts publicados en este blog donde la información sobre tecnología y accesibilidad, así como la literatura, ha sido la prioridad.
Queremos celebrar esta ocasión, consignando la relación más reciente de posts aparecidos en el Blog de Infolector:
Miércoles 8 de diciembre de 2010
Libro: el sueño del celta
La Última Novela de nuestro Nóbel.
En el foro Infolector, nuestro amigo, el profesor Víctor raúl Portocarrero nos comparte una excelente noticia para los lectores invidentes. nos avisa que a su vez, el profesor alipio Montes ha compartido la última novela de Mario Vargas Llosa, 'El sueño del celta'. Aquí el enlace de descarga del libro
...
Leer todo: http://infolector.cidesi.org/2010/12/libro-el-sueno-del-celta.html
Llega el sistema Operativo de Google
Chrome, ¿el Sistema Operativo que desplazará a google?.
Publico.es.
Como ya se había señalado en el foro de Infolector, Google venía preparando el lanzamiento de Chrome O.S., su sistema operativo basado en Internet. La idea central, según se explica aquí, es la
Leer todo: http://infolector.cidesi.org/2010/12/llega-el-sistema-operativo-de-google.html
domingo 5 de diciembre de 2010
Programa ÀGORA PERÚ
Felicitaciones varias por logros en 'Inclusión Laboral'.
Proyecto 'Àgora'.
Queremos desde esta tribuna, hacer llegar todas nuestras felicitaciones al equipo del 'Programa Àgora Perú', a cargo de
Leer todo: http://infolector.cidesi.org/2010/12/programa-agora-peru.html
sábado 4 de diciembre de 2010
Una alternativa tipo skipe para iPhone
Llamar desde el Teléfono, con solo conexión a la Red.
Applesfera.
Para los usuarios de iPhone, acaba de salir una alternativa para llamadas VoIP; vale decir, voz mediante la conexión de Internet. Así como el skipe es, ha sido, la mejor aplicación para establecer llamadas con nuestros contactos, desde la PC, para el usuario de
Leer todo: http://infolector.cidesi.org/2010/12/una-alternativa-tipo-skipe-para-iphone.html
viernes 3 de diciembre de 2010
Los Libros para sheila
Con los títulos de Eduardo Galeano.
Infolector Image.
A pedido de nuestra amiga Sheila Mesía de la Biblioteca de san borja, compartimos aquí alguno de los principales títulos del autor uruguayo Eduardo Galeano:
Bocas del Tiempo. Doc.
Días y Noches de Amor y de Guerra. Doc.
El
Leer todo: http://infolector.cidesi.org/2010/12/los-libros-para-sheila.html
martes 30 de noviembre de 2010
Brasil, el país que más utiliza Twitter
No solo a nivel regional, sino en el mundo.
Marketing Digital.
Según una nota aparecida en Internet, Brasil está entre los países que más utiliza Twitter en todo el mundo. En la relación, aparece Latinoamérica como una de las regiones con más países usuarios de
Leer todo: http://infolector.cidesi.org/2010/11/brasil-el-pais-que-mas-utiliza-twitter.html
miércoles 24 de noviembre de 2010
Cuatro Servicios Mínimos en Internet
Y Cuatro Más para tener presencia en la red.
Infolector Blog.
En esta ocasión nos interesa compartir un grupo de cuatro y cuatro. Vale decir cuatro servicios mínimos, indispensables para mantener una cierta presencia en la Web, en el mundo virtual, donde
Leer todo:

Libro: el sueño del celta

Infolector Blog.
La Última Novela de nuestro Nóbel.
En el foro Infolector, nuestro amigo, el profesor Víctor raúl Portocarrero nos comparte una excelente noticia para los lectores invidentes. nos avisa que a su vez, el profesor alipio Montes ha compartido la última novela de Mario Vargas Llosa, 'El sueño del celta'. Aquí el enlace de descarga del libro.
No sabemos cuánto tiempo se mantendrá el libro, disponible para descarga pero, en todo caso, dado que este es un Blog orientado a la accesibilidad de personas con discapacidad visual, trataremos de poner el libro en un formato adecuado para estos fines. Entre tanto, tal como nos sugiere el profesor Portocarrero, disfrutar y sumergirse en la historia de Roger Casement.

Llega el sistema Operativo de Google

Chrome, ¿el Sistema Operativo que desplazará a google?.
Publico.es.
Como ya se había señalado en el foro de Infolector, Google venía preparando el lanzamiento de Chrome O.S., su sistema operativo basado en Internet. La idea central, según se explica aquí, es la de una interfase basada en Linux que permitirá ejecutar utilitarios y realizar tareas desde la Web. Nada se instala en el equipo, no se usan mayores recursos del dispositivo que estemos usando.
Lo que no sabemos todavía es algo acerca de su accesibilidad para usuarios con discapacidades, y discapacidad visual en especial. Google ya tiene un proyecto de accesibilidad para usuarios ciegos, el Eyes-free, para android. Pero aún no se anuncia algo parecido para este nuevo sistema operativo Chrome, ni si el proyecto Eyes.Free se extenderá a Google Chrome, como solución de accesibilidad.
Esto es fundamental para determinar si esta nueva plataforma podrá ser de utilidad para la comunidad de usuarios con discapacidad visual y para saber si Google está pensando en todos sus potenciales usuarios. Dejamos aquí la información aparecida en Público.es:
La compañía del buscador reta a Windows ofreciendo su nuevo software a usuarios en EEUU, instalado en portátiles sin marca.
Ligero, orientado a internet y gratuito. Esos son los apellidos de Chrome, el nuevo sistema operativo de Google con el que el buscador quiere retar el dominio de Microsoft y su Windows. Diseñado a partir de software libre, Chrome OS irá preinstalado en una serie de portátiles que la compañía ha invitado a probar a una selección de usuarios y, a partir de 2001, en los portátiles de Samsung y Acer. Para apoyar el lanzamiento, Google también abre tienda de aplicaciones para su recién nacido sistema operativo.
"Estamos en un viaje a la informática en la nube", dijo ayer el presidente de Google, Eric Schmidt, en referencia al trabajo en red. "Nos ha llevado tiempo, y que la red sea más veloz y más fiable", añadió, y confesó que, frente a la opinión de los fundadores, Larry Page y Sergey Brin, él nunca quiso que la compañía se metiera en el negocio del navegador y del sistema operativo hasta que se ha dado cuenta de que "tenemos un programa que es veloz y escalable".
La empresa asegura que será ligero, orientado a internet y gratuito.

domingo, 5 de diciembre de 2010

Consultoría Especializada en Accesibilidad e Inclusión Digital

Lucio LinkedIn
Gestor de proyectos en accesibilidad e inclusión digital, con experiencia en márketing digital. Dominio en la aplicación de estándares de la WAI (Web Accessibility Iniciative) del W3C, con énfasis en el uso de tecnología estándar para eliminación de barreras en entornos digitales.

Lucio Suárez Sánchez

Consultor en Accesibilidad e Inclusión Digital
Ciencias de la Información por la Universidad Nacional Mayor de San marcos
  • Ha sido asesor en accesibilidad Del programa Cisco Networking Academy.
  • Ha sido consultor de accesibilidad en ISIL-TECH del Instituto San Ignacio de Loyola
  • Ha sido Coordinador de Proyectos de Inclusión digital en INICTEL de la Universidad Nacional de Ingeniería
  • Ha sido miembro consultor de la CODESI, Comisión Multisectorial para el Desarrollo de la Sociedad de la Información de la PCM en 2004
  • Fue elegido para el curso Gestión de Proyectos Cofinanciados. - por la Agencia Española de Cooperación para el Desarrollo y la FOAL

sábado, 4 de diciembre de 2010

Una alternativa tipo skipe para iPhone

Llamar desde el Teléfono, con solo conexión a la Red.
Applesfera.
Para los usuarios de iPhone, acaba de salir una alternativa para llamadas VoIP; vale decir, voz mediante la conexión de Internet. Así como el skipe es, ha sido, la mejor aplicación para establecer llamadas con nuestros contactos, desde la PC, para el usuario de iPhone, sale Viber.
Viber es una aplicación para iPhone, y muy probablemente dentro de no mucho para otros teléfonos inteligentes, que ofrece la posibilidad de llamar a nuestros contactos, con solo marcar el número telefónico. No tenemos la molestia que da el Skipe de tener que esperar la aceptación del contacto, sino, directamente se establece la conexión.
Para los usuarios del iPhone, pueden descargarse aquí la aplicación de la app Store. Y para los interesados en conocer un poco más de esta aplicación, pueden encontrar un video en Youtube.
Sobre su accesibilidad, aún no lo hemos probado, pero, dada las características de autorización de apple, lo más probable es que no haya mayor problema, siendo además, que solo es un tema de listados de contacto e inicio y recepción de llamadas Apenas lo probemos, estaremos posteando ya como un caso a compartir.